Growth Hacking 101

Me han entrevistado recientemente en el canal de tecnología y formación de seosve en YouTube para hablar de Growth Hacking (entre otras muchas cosas) y han surgido algunos temas interesantes alrededor de todo lo que ha cambiado esta disciplina en los últimos años.

Aprovecho para extraerlos aquí y poder usarlo como fuente o glosario para otros post futuros.

¿Qué es el Growth hacking?

Growth hacking, growth marketing o growth, a secas, todo es lo mismo: un conjunto de acciones y técnicas que nos permiten descubrir palancas de crecimiento en un producto digital. Estas palancas se basan fundamentalmente en la experimentación, aunque no solo.

Si tuviera que reducirlo a una fórmula simple sería algo como esto:

Producto digital + Marketing + Tecnología + Ciencia + Psicología = Crecer de forma sostenible y coherente

En mi casa, Product Hackers, nos solemos referir a esta disciplina como Growth directamente. Sin apellidos.

La eliminación del apellido no es porque tengamos nada en contra del hacking, ni mucho menos. Al contrario. De hecho la mayoría de los profesionales de PH son auténticos hackers en el sentido más radical de la palabra: una persona que trata de romper los límites de la tecnología para crear algo mejor, más avanzado o potente (esta es una definición tomada de glider.es que me encanta).

Pero hacker es un concepto que, al menos en la cibercultura popular hispana, tiene cierta connotación negativa relacionada con técnicas poco éticas o incluso ilegales.

Aunque muchos sepamos que no es así.

Además, el concepto de growth hacking se ha pervertido un poco al relacionarse con técnicas de crecimiento artificial que infringen algunas leyes, normalmente relacionadas con el SPAM o la privacidad, y que a menudo no son sostenibles en el tiempo. Como es lógico, esta genera preocupación a algunas empresas que son clientes potenciales.

Para evitarlo, nos alejamos un poco de esa idea.

Llegado a este punto debo aclarar que el Growth afecta a muchas áreas de una empresa, no solo al departamento de ventas. Se puede aplicar la metodología Growth al departamento de recursos humanos, al de diseño de producto o la búsqueda de partners. Todo es sensible de crecer gracias a la experimentación y el método científico.

¿Cómo se hace Growth?

En Product Hackers dividimos el proceso en 3 fases que se van iterando (ese es uno de los fundamentos del método científico y el agilismo):

  • Fase de Discovery
    • Estrategia de Growth
    • Validación proceso de experimentación
    • Identificación de oportunidades
    • Ideación
    • Roadmap experimentación
  • Fase de experimentación
    • Diseño, desarrollo, monitorización, análisis y extracción de conclusiones y aprendizajes
    • Reunión semanal
    • Comunicación diaria mediante slack/teams
  • Revisión mensual o Growth Strategy Review
    • Creamos y validamos conjuntamente un roadmap para los próximos meses teniendo en cuenta descubrimientos continuos, resultados y aprendizajes.

Las dudas más frecuentes se producen en las fases iniciales, durante la definición de objetivos, oportunidades y experimentos. En la fase de Discovery tratamos de resolver estas dudas usando el GOI Tree:

Jose Carlos Cortizo, CMO de Product Hackers explicando el GOI Tree

Para ello:

  1. Se define una North Star Metric
  2. Generamos una lista de Objetivos o Goals para el proyecto que funcionen como palancas para activar la North Star
  3. Identificamos diferentes oportunidades para mover la aguja de cada objetivo
  4. Generamos un conjunto de ideas para cada oportunidad
  5. Traducimos esas ideas en experimentos

Las ideas a menudo surgen a partir de los sesgos cognitivos más conocidos. Algunos de ellos, como la Ley de Hick, que dice que el tiempo que hay que invertir para tomar una decisión se incrementa con el número de opciones y la complejidad disponibles, son el ABC del growth hacker.

En este artículo le di un repaso importante a más de treinta sesgos cognitivos aplicables al growth hacking.

Experimentos de Growth

Es importante explicar que un experimento es un instrumento de medición que genera un aprendizaje y nos permite validar una hipótesis con un cierto umbral de confianza.

Algunos de los problemas con que nos vamos a encontrar durante el trabajo de definición de experimentos son la dificultad en extraer resultados veraces con poco tráfico, los costes de desarrollo de algunos casos o que el impacto del experimento sea menor al esperado (normalmente debido a que los problemas atacados no son importantes para el usuario).

Los experimentos por antonomasia en el Growth Hacking son los test AB.

He hablado de AB Testing antes en este mismo blog, así como de los mapas de calor, que también son muy frecuentes. Pero hay muchísimas más tipos de experiencias que se pueden valorar. Por ejemplo:

  • Las entrevistas con usuarios y las encuestas online
  • Los Smoke test o experimentos con funcionalidades que aún no existen
  • Las preventas y reservas
  • El test de Mago de Oz, donde un operador simula una funcionalidad que parece automatizada
  • Los mistery shopper o simulación de compradores anónimos
  • Las grabaciones de sesiones de usuario.
  • Los test AB más avanzados como el multi armed bandit, que nos permite no sacrificar ganancias durante la fase de test.

No limites tu experimentación en uno o dos tipos de acciones. Hay muchas posibilidades que se adaptan a la naturaleza de cada caso con factores limitantes como el volumen de tráfico, por ejemplo.

En la página de casos de éxito de Product Hackers tienes algunos ejemplos de procesos de Growth con marcas muy conocidas que pueden inspirarte para tus propios proyectos.

Mi objetivo es tener este post en revisión continua así que si tienes alguna aclaración, sugerencia o duda me encantaría que la dejarás en los comentarios y la añadiré al texto.

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